Todo nuestro proceso de elaboración es completamente artesanal y tradicional. Desarrollado por expertas fileteras, el secreto está en tratar con mimo la materia prima comprada el mismo día a escasos 6 km de nuestras instalaciones.

Todo comienza con la compra de la materia prima. Desde Nardín, asistimos personalmente a las subastas en el puerto de Getaria. Allí, después de revisar todo el producto traído por los pescadores del Mar Cantábrico, seleccionamos la pesca que compraremos. Para ello, comparamos partidas y discutimos calidades hablando con los propios pescadores. Solo de esta manera logramos la mejor materia prima. Posteriormente, acudimos a la puja y pujamos por la partida que más nos interesa, verificamos la compra in situ y la cargamos en nuestra furgoneta en pequeñas cantidades asegurando que no transcurra más de 1 hora desde la compra hasta la llegada a nuestras instalaciones. 

En Conservas Nardín, compramos únicamente la cantidad que procesaremos durante ese mismo día, preservando así toda la frescura y asegurando la mejor calidad del producto final

Todos los ingredientes que utilizamos en la elaboración de nuestros productos son de primera calidad:

  • El agua para la salmuera viene de manantiales naturales.
  • La sal está debidamente secada en origen para que no aporte ninguna impureza o sabor adicional. 
  • El aceite es de una casa de primer nivel, de pequeña producción, seleccionado por su calidad y sabor.
  • Las maderas son autóctonas, de nuestros bosques. Las recogemos acorde con la época de tala con el control y permiso adecuados, asegurando la sostenibilidad de nuestros bosques.

Todos nuestros productos son completamente naturales. No hacemos uso de aditivos, ni conservantes. Además, en la elaboración de nuestros productos ahumados, no utilizamos ningún químico para aromatizarlos si no que las ahumamos únicamente con humo natural de las maderas.

Nuestros productos son aptos, por este motivo, para el consumo de cualquier persona. Esto incluye a celíacos y alérgicos en general. Siendo el único alérgeno el propio pescado.