Si mantener una alimentación saludable es importante para la población en general, cobra una mayor importancia aún cuando se trata de la alimentación infantil. Durante esta etapa, los niños necesitan una alimentación variada que les permita crecer, desarrollar su actividad física y estar sanos. Una dieta equilibrada y variada en platos, sabores, texturas e incluso colores, harán que sus paladares se acostumbren a comer de todo.

Dentro de toda la gama de alimentos dentro del desarrollo de la alimentación infantil, un alimento fundamental es el pescado, junto a carnes, verduras, huevos y cereales, el pescado tiene que estar presente en la alimentación infantil para que esta sea variada y equilibrada. Hemos mencionado con anterioridad las bondades del pescado, haciendo hincapié en el pescado azul, por su cantidad de proteínas, vitaminas A y D, minerales y los ácidos grasos beneficiosos que contienen.

Una manera sencilla de incorporar a la alimentación de los niños este pescado azul, la encontramos en las conservas. Caballa, anchoas, lomos de bonito o ventresca, presentados de manera muy apetecible en latas y frascos de cristal, y sobre todo sin espinas, los convierte en pequeños aliados deliciosos y nutritivos, ya que son ideales para meriendas y cenas, sea en bocadillos, ensaladas o tomándolos solos, ya que son alimentos que no pierden sus propiedades en el proceso de elaboración.

Una preocupación que suelen tener los padres es hasta qué punto puede ser adecuado dar conservas a sus hijos. Como recomendación general, se recomienda el consumo de pescado fresco hasta cuatro veces por semana, viéndose esa cantidad reducida a tres veces por semana en el caso del pescado en conserva. Esta recomendación suele deberse a que los pescados en conserva tienden a tener mayor cantidad de sal. Otros puntos a tener en cuenta son los siguientes:

  • Escoger las conservas de mayor calidad y de las marcas que ofrezcan mayor confianza y garantías. Por ejemplo en Conservas Nardín solamente utilizamos el mejor pescado y una mano de obra y procesos de gran calidad para elaborar nuestras conservas y semiconservas.
  • Leer atentamente las etiquetas de los envases; De esta manera sabremos los ingredientes y valores nutricionales, el modo de conservación, caducidad y procedencia. Desde conservas Nardín garantizamos que todo el pescado capturado para elaborar nuestras conservas proviene del Cantábrico y utilizamos ingredientes y procesos con todas las garantías para asegurar la mejor calidad final del producto.
  • En caso de encontrarse con una lata abombada o hinchada, o con algún frasco con aspecto extraño o que haya dejado escapar el líquido a través de la tapa, lo mejor es desecharlos, ya que sin importar el envase, deben estar perfectamente cerrados y sellados cuando llegan a nuestras manos. En Nardín vigilamos con gran cuidado todos los pasos y nos aseguramos de que las latas y frascos llegan en estado óptimo a vuestras manos.

Desde Conservas Nardín, recomendamos el consumo de conservas de pescado tanto en adultos como incorporándolos a la alimentación infantil, siempre siguiendo las recomendaciones de cantidades adecuadas, dentro de una dieta equilibrada y variada.

Como ya sabéis, disponemos de Conservas de Bonito del norte en múltiples formatos, tanto lomos, trozostroncos o migas, así como en ventresca de bonito, todos ellos con una baja cantidad de sal, siendo muy adecuados para los más pequeños de la casa. Disponemos también de semiconservas de anchoas y ahumados, que si bien deberán ser consumidos por los peques en menor cantidad por ser un aporte de sal algo mayor, les encantarán.

Si queréis ideas de cómo incorporar nuestras conservas a la alimentación de vuestros hijos, dejadnos un comentario y elaboraremos una serie de recetas especialmente dedicadas a los peques!

recetas niños

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